El domingo pasado como buena vasca, mochila al hombro y de trekking que nos fuimos al nacedero del Urederra, en la sierra de Urbasa, Navarra. Le tenía muchísimas ganas desde hacia tiempo, pero por una cosa u otra no pude ir antes. Quedamos maravillados con el agua cristalina. Las ganas inmensas de pegarse un chapuzón crecía por momentos, hasta que metimos un pie en el agua... ni 5 segundos y se te agarrotaba de lo congelada que estaba. Hubo valientes que se metían por completo, eso si, salían como nuevos. Yo creo que si hubiese entrado allí me quedo petrificada, tal cual.
Bueno no me lío más, os dejo con unas pocas fotos del día. La luz no era demasiado buena por la escasez de luz entre la arboleda pero bueno, ahí van.
Y aquí os dejo un pequeño vídeo mientras paseábamos por el bosque
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